Aprender @ Aprender: febrero 2014

1. La recuperación económica

Los progresos agrícolas

1. Innovaciones técnicas:

El arado pesado con punta de hierro, vertedera y ruedas, herraduras metálicas y un nuevo tipo de arnés que permitió el uso de caballos, mas rápido que los bueyes.

2. Nuevos métodos en la agricultura:

En este siglo surgieron más metodos de agricultura pero el más importante fue el sistema de rotación trienal de cultivos. Además se comenzaron a cultivar leguminosas, habas, arvejas, alfalfa y trébol. Sistema de rotación trienal.

El auge de la artesanía

Todos los profesionales medievales para poder ejercer debían pertenecer a un gremio. Estos eran asociaciones que controlaban cada profesión en la cidudad para evitar la libre competencia, el intrusismo profesional y controlar los precios, con el fin de mantener unos ingresos dignos para todo el colectivo. Además perseguían otros fines más sociales, como la asistencia a los enfermos pertenecientes al gremio o a sus familias en caso de muerte.

Cada gremio poseía unos estatutos que regulaban toda la actividad de dicha profesión, así como los derechos y deberes de sus asociados.

Cada oficio tenía tres categorías profesionales, que a su vez servían para la formación del trabajador:

a) Aprendiz: joven acogido en casa del maestro que a cambio únicamente de la manutención realizaba cualquier tarea en el taller e iba aprendiendo el oficio.

b) Oficial: trabajaba en el taller de un maestro a cambio de un salario.

c) Maestro: era el dueño del taller y sus herrmientas. Podía contratar a oficiales y tener aprendices en su taller. Junto con los otros maestros de la misma profesión formaban el gremio. Para acceder a esta categoría los oficiales podían pasar una prueba consistente en realizar una obra maestra que debía ser juzgada por los maestros del gremio. Era muy difícil su aprobación para evitar que aumentase la competencia. Normalmente los talleres se heredaban de padres a hijos.

El resurgimiento del comercio

Los mercaderes especializados en el comercio a larga distancia fueron en principio los italianos, en especial venecianos y genoveses, que se dirigían con sus barcos al Este del Mediterráneo. Allí fundaron colonias desde las que comerciaban. Por esos puertos del Mediterráneo oriental llegaban a Europa productos exóticos, más o menos necesarios, como las especias o las sedas. Ese comercio fue muy activo hasta la llegada de los turcos otomanos al Este europeo a comienzos del siglo XV.

Otra área europea especialmente importante en el comercio fue la zona del Báltico, en la que durante los siglos XIV y XV se desarrolló un grupo de ciudades que formaron una asociación denominada la Hansa (palabra alemana que se traduce por liga). Casi cien ciudades, entre las que se encontraba Lübeck, Hamburgo, Bremen o Danzig, formaban esa confederación. Operaba a gran escala, y sus barcos llevaban por el Báltico pescado, madera, cereales, pieles. Metales y ámbar hasta los mercados de Europa Occidental, y regresaban con paños, vino y especias.

2. El renacer urbano

Causas del crecimiento urbano

El crecimiento de la población de las ciudades fue posible por la emigración desde el medio rural, dónde la población había crecido mucho y sin embargo las mejoras en la agricultura hacían necesarios menos campesinos. Por otra parte las ciudades ofrecían unas mejores condiciones de vida para artesanos y comerciantes, puesto que no dependían de ningún señor feudal, sino que dependían directamente del rey y tuvieran un gobierno propio (el Concejo o Ayuntamiento).

La expansión urbana

Desde el siglo XII y sobre todo en el siglo XIII se inicia la recuperación de la vida urbana que había decaído desde los inicios de la edad media con la desaparición de la civilización romana. Este aumento del número de ciudades y de los habitantes que estas acogían se debió fundamentalmente al crecimiento econonómico provocado por la mejora de la agricultura y el fortalecimiento del comercio y el consecuente crecimiento de la población. Así nacieron nuevas aglomeraciones urbanas y se recuperaron otras que ya habían tenido importancia en el pasado.

Génesis de la burguesía

Fue en las ciudades medievales donde se produjo la génesis de la burguesía. Esta palabra la define el Diccionario de la Real Academia de la Lengua: “En la Edad Media, clase social formada especialmente por comerciantes, artesanos libres y personas que no estaban sometidas a los señores feudales. Grupo social constituido por personas de clase media acomodada”
RAE

La palabra burguesía se aplicaba originalmente a los habitantes de los burgos, que eran “fortalezas construidas por los nobles feudales para vigilar los territorios de su jurisdicción, donde se asentaban grupos de comerciantes, artesanos, etc.”
Diccionario de la Real Academia de la Lengua
O barrios exteriores a las ciudades donde se asentaban también gentes que desempeñaban oficios artesanos o comerciales. En principio la palabra burguesía no era equivalente de grupos sociales acomodados porque esos artesanos y mercaderes eran trabajadores que se ganaban la vida con esos oficios, y que constituían, junto con los campesinos, el estado social denominado pueblo. Con el tiempo los artesanos y especialmente los mercaderes se fueron enriqueciendo, e integraron los grupos acomodados de las ciudades con los que luego se identificó la palabra burguesía.

El fortalecimiento del poder monárquico

(Recuerda que en el tema 2 en el apartado de feudalismo y vasallaje quién tenía el poder real durante la primera parte de la edad media)

Con la mejora de la economía a partir del siglo XIII el rey adquiere mejor posición económica y ya no depende tanto de las cesiones de los nobles. Se intenta recuperar el poder real frente a la nobleza mediante la mejora de su propio ejército (que ayudó a imponer las decisiones reales frente a nobles díscolos), el fortalecimiento de la administración real o mediante la concesión de fueros a las ciudades (por lo que dejaban de depender de un noble y por tanto el rey se ganaba su apoyo).

El fortalecimiento interno de las monarquías favorecía que los reyes dedicaran mayor esfuerzo a su engrandecimiento externo mediante la ampliación territorial del reino. Esta amplición en muchas ocasiones se debía a alianzas matrimoniales, que hizo que gran parte de las monarquías europeas estuvieran emparentadas. Cuando un rey moría sin descendencia, el resto de las coronas reales emparentadas con él se enfrentaban por el control de dicho reino, generando guerras sucesorias como la Guerra de los Cien Años (1337-1453) qué enfrentó a Inglaterra con Francia.

Asambleas Parlamentarias

Cortes en el Reino de León y en el de Aragón